Ayer escuché un fragmento de un audiolibro que decía que somos los que imposibilitamos nuestra propia felicidad cuando buscamos pretextos para no hacer exactamente lo que queremos y no estar exactamente donde nos gustaría. El autor decía que una de las formas en que nos quedamos estancados justo donde estamos [sin querer exactamente estar ahí] es "siendo" conformes con lo que tenemos con las excusas de que "al menos tengo algo, hay otros que están peor" o, como dice un famoso dicho, "es mejor malo conocido que bueno por conocer", de modo que nos auto-negamos la posibilidad de vivir nuestros sueños. Otra forma muy usada es echarle la culpa a alguien más por lo que dejamos que pase con nosotros: "Yo quería ser esto, pero mi familia nunca me apoya.", "Me gusta viajar, pero no puedo, porque mis se llevan todo mi tiempo.", "Quería tener un negocio, pero mi marido no quiere trabajar en ello.".

Luego me quedé un rato pensando en todas las cosas que he querido hacer en la vida y que, si vuelvo en mi mente a ese/esos momento/s, SÉ que habría podido hacerlo, sólo requería un poco más de mi esfuerzo y dedicación; si necesitaba dinero, podía usar mis habilidades manuales [por ejemplo] para ganarlo, si necesitaba tiempo, podía ordenar mis actividades. A veces queremos hacer algo y como en el momento exacto no podemos, simplemente tachamos ese deseo y seguimos con nuestras vidas monótonas y vacías: ERROR. Si hacemos así con todas las cosas y las tachamos o las "dejamos para después, cuando haya dinero y tiempo" llegaremos a una edad algo tarde en que REALMENTE no tendremos tiempo o la capacidad física que requieren algunas actividades. Otro ejemplo que ponía el autor era el de las relaciones interpersonales [y vaya que fue triste oírlo y pensar "es totalmente cierto"] en que las personas se perjudican una a la otra pero piensan "no voy a encontrar otra persona que me entienda, aunque tenga que aguantar lo demás, me quedo con esta" o algo como "si termino esta relación que A VECES va bien, tal vez nunca sea ni un poquito feliz con nadie más".
Sólo nosotros decidimos que tan bien o mal nos va en la vida, todo depende de las decisiones que tomamos, de la paciencia que tengamos y de cuan importante es para nosotros alcanzar algún objetivo. No hay que esperar a que se termine lo que tenemos, por su propia cuenta, cuando en nuestras manos está dejarlo y buscar algo mejor [o no...]. LLEGAR a donde queremos está en las ganas que pongamos al correr hacia nuestra meta.



Hace unos días leí en algún lugar esta corta pero intensa frase: Esperar es sufrir. Y me di cuenta de que no sufro demasiado esperando porque, por lo general, todo pasa muy rápido a mi alrededor y normalmente culpo al mundo que me rodea por ello pero lo pensé por un momento, después de leer la frase, y me dije a mi misma: ESE es tu problema; eres demasiado impaciente. No sabes esperar.

Esperar no se trata exactamente de estar convencido de que va a llegar 'algo' y saber que cualquier cajita que ponen a tu lado, pero que aún no te entregan, puede contener eso que esperas. Si piensas así, entonces te desesperas y destapas todo para al final tener que seguir esperando porque ninguna era la tuya y vas a haber arruinado las cajitas que estaban destinadas a otras personas.

Esperar es mejor cuando te olvidas de que estás esperando, disfrutas cada segundo de tu vida, cada respiro, cada sueño, cada cosita que te rodea y das todo de ti para que todo funcione bien. Saber esperar es poder sonreír, amar, dar, vivir y olvidar que se nos da algo a cambio de lo que damos. Para quien sabe esperar, el tiempo no significa nada. Quien sabe esperar no espera nada.

Esperar es sufrir, pero estoy segura de que no hay que sufrir esperando. ^^


"Enjoy the little things in life, for one day you'll look back and realize they were big things."

About this blog

"La razón teme la derrota, pero la intuición disfruta la vida y sus desafíos."
Pablo Coehlo